retos

A veces es necesario probar diferentes cosas, libros, autores, recetas, tomar riesgos, no es fácil, es arriesgado, y uno puede perder  o ganar mucho, o bien lograr algo que no es un éxito pero tampoco un fracaso,  recuerdo haber probado una receta de rollos de canela, de encubos.blogspot.com, y decirme bueno no diré que no lo intenté... y,  quedaron geniales, si un día se animan a hacerlos, chéquen ese blog, hubo quien me dijo que estaban mejor que los de marca bimbo.

Pero si he de decir la verdad, no soy alguien que se arriesgue mucho _si, creo que 2 atropellamientos, un montón de caídas de bardas y haber sido perseguida por innumerables perros, (uno se lanzó desde una azotea) no ha sido suficiente_, por que han sido eventos en los que he estado por casualidad, no los he buscado, me han sucedido.

Ser mujer es un reto siempre, pero no nos ayuda mucho que desde pequeños sean los chicos los que reciben las mayores indicaciones de independencia, sirve de ejemplo una anécdota, un día, en una zapatería se encontraba una atribulada mujer con dos niños, un chico y una chica, como de 5 y 6 años más o menos, ambos hacían de las suyas se subían a los sofas y corrían sobre los asientos, se tiraban al piso y hacían maromas en la alfombra, sin embargo la única personita que fue regañada, zarandeada y colocada a fuerzas en una silla, fue a la pequeña, el niño no recibió ni con mucho la corrección dada a su hermanita, a quien le ordenaron -y te quedas quieta.

Ah no,  basta de quedarse quieta, es hora de tomar nuevos retos.